Hoy en día, el aspecto físico en los deportes de equipo se ha convertido en un factor determinante para el éxito, y el baloncesto no es una excepción. Un ejemplo claro lo podemos ver en la NBA. Podría causar controversia el hecho de decir que nos encontramos ante la liga con los mayores conceptos tácticos, pero no cabe duda de que es la más minuciosa en aspectos técnicos y, sobre todo, la más exigente a nivel físico. Esa mezcla de cualidad de sentido del juego y especificación en el trabajo físico da como resultado la formación compuesta por varios de los mejores jugadores del planeta.